El divorcio que la tipografía y las páginas web han tenido desde su inicio, parece que ya ha iniciado el camino de la reconciliación. La forma de hacerlo, es gracias a unos nuevos formatos de tipografías pensados especialmente para la web. Estos son el EOT utilizado en Internet Explorer , y el prometedor WOFF de Firefox, que todo indica que se popularizará como estándar, ya que esta apoyado por la mayoría de fundiciones digitales. Encontrareis más información sobre el tema en el blog de Andreu Balius.
Para la creación de este tipo de fuentes, existe una aplicación on line en el web de Fontsquirrel, que permite subir fuentes en formato TTF y OT y convertirlas a los mencionados formatos y a la vez, generar los archivos CSS necesarios para su correcta visualización en los navegadores.
Eso si, hay que tener claro si las licencias de las tipografías que poseemos, nos permiten hacer este tipo de conversión, que en el caso de las comerciales, no acostumbra a estar autorizado.